Paso 1: Preparar la carne
Comienza preparando las chuletas de cerdo. Si son gruesas, puedes aplastarlas un poco con un mazo de cocina hasta que tengan un grosor uniforme, de aproximadamente 1 cm. Sazona las chuletas con sal y pimienta por ambos lados.
Paso 2: Rellenar con el queso
Coloca una rebanada de queso en el centro de cada chuleta. Si las chuletas son lo suficientemente grandes, dóblalas por la mitad para cubrir bien el queso en su interior. Si son más pequeñas, coloca una segunda rebanada de queso encima para que quede bien sellado. Puedes usar palillos de dientes para mantener la carne cerrada y evitar que el queso se escape durante la fritura.
Paso 3: Empanizar la carne
Prepara tres platos hondos: uno con la harina, otro con los huevos batidos, y el último con el panko. Pasa cada chuleta por la harina (esto ayuda a que el huevo se adhiera mejor), luego sumérgelas en el huevo batido, y finalmente cúbrelas con panko. Asegúrate de que las chuletas estén bien empanizadas para obtener un buen crujiente.
Paso 4: Freír las chuletas
En una sartén grande, calienta suficiente aceite vegetal a fuego medio-alto. Una vez que el aceite esté caliente (alrededor de 170-180°C), fríe las chuletas empanizadas por ambos lados, unos 4-5 minutos por lado, hasta que estén doradas y crujientes. El queso dentro se derretirá a la perfección mientras la carne se cocina. Coloca las chuletas fritas sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
Paso 5: Servir
Una vez que las chuletas estén listas, retira los palillos de dientes con cuidado. Sirve el tonkatsu con queso inmediatamente, acompañado de repollo rallado si lo deseas, o con arroz al vapor y alguna salsa japonesa como tonkatsu o salsa de soja.
Consejos adicionales:
- Variante de queso: Puedes experimentar con diferentes tipos de queso. Mozzarella aportará un estiramiento espectacular, mientras que el cheddar ofrecerá un sabor más pronunciado.
- Salsa tonkatsu: Si tienes a la mano salsa tonkatsu, úsala como acompañamiento. Su sabor dulce y umami complementa perfectamente este platillo.
- Freír con precaución: No sobrecalientes demasiado el aceite, ya que podría dorar el exterior demasiado rápido sin que el queso se derrita adecuadamente.