Ingredientes:
500 g de queso crema
4 huevos
150 g de azúcar
200 ml de nata líquida (crema de leche)
1 cucharada de harina de trigo
1 cucharadita de esencia de vainilla
Mantequilla para engrasar el molde
Instrucciones:
Precalentar el horno:
Precalienta el horno a 180 °C (350 °F). Engrasa un molde redondo desmontable con mantequilla y, si lo prefieres, cúbrelo con papel de horno para facilitar el desmoldado.
Mezclar los ingredientes:
En un bol grande, bate el queso crema con el azúcar hasta obtener una mezcla suave y sin grumos. Añade los huevos uno a uno, batiendo después de cada adición para que queden bien integrados.
Incorporar la harina y la vainilla:
Tamiza la harina de trigo sobre la mezcla y bátela con movimientos suaves para evitar grumos. Agrega la nata líquida y la esencia de vainilla, mezclando hasta obtener una crema homogénea.
Verter la mezcla en el molde:
Vierte la mezcla en el molde previamente preparado y alisa la superficie con una espátula.
Hornear:
Lleva la tarta al horno y hornea durante 40-50 minutos. La parte superior debe dorarse ligeramente, y al mover el molde, el centro debe temblar ligeramente, como un pudín.
Enfriar:
Deja enfriar la tarta dentro del horno apagado con la puerta entreabierta durante 10-15 minutos para evitar que se agriete. Luego, refrigérala durante al menos 4 horas (mejor si es toda la noche) para que adquiera su textura cremosa característica.
Servir:
Desmolda la tarta con cuidado y sírvela sola o acompañada de mermelada, frutos rojos frescos o un toque de azúcar glas.
Tiempo de preparación: 15 minutos | Tiempo de cocción: 50 minutos | Tiempo de refrigeración: 4 horas
Calorías: 350 kcal por porción | Raciones: 8-10