Deja reposar la masa:
Déjala reposar: coloca la masa nuevamente en el tazón, cúbrela con un paño de cocina limpio y déjala reposar en un lugar cálido durante aproximadamente 1 hora o hasta que duplique su tamaño.
Dar forma y cocinar el pan plano:
Divida la masa: después de que la masa haya subido, colóquela sobre una superficie ligeramente enharinada y divídala en 8 partes iguales.
Dale forma al pan plano: forma una bola con cada trozo de masa y luego aplánalo hasta formar un disco de aproximadamente 1/4 de pulgada de grosor.
Cocina el pan plano: calienta una sartén o plancha antiadherente a fuego medio-alto. Pincela cada lado del pan plano con mantequilla derretida. Cocina cada pan plano durante aproximadamente 2 a 3 minutos de cada lado o hasta que esté dorado y bien cocido. Pincela con más mantequilla derretida según sea necesario.
Atender:
Sirva caliente: sirva los panes planos calientes, ya sea solos o con sus salsas, sopas o aderezos favoritos.
Sugerencias para servir:
Combínalo con hummus, tzatziki o tu salsa favorita.
Sirva junto con una sopa abundante o un guiso.
Disfrútelo como un wrap de sándwich con sus rellenos favoritos.
Consejos de cocina:
Asegúrese de que la masa esté bien amasada para desarrollar el gluten, que le da al pan plano su textura masticable.
Puedes agregar otras hierbas o especias a la masa para darle más sabor.
Beneficios nutricionales:
Espinacas y cebollas verdes: ricas en vitaminas y minerales, que añaden valor nutricional al pan plano.
Mantequilla: Añade sabor y ayuda a conseguir una textura crujiente.
Información dietética:
Vegetariano: Sí
Contiene gluten y lácteos: ajuste los ingredientes según las necesidades dietéticas.
Consejos de almacenamiento:
Guarde los panes planos sobrantes en un recipiente hermético a temperatura ambiente durante hasta 2 días.
Calentarlos nuevamente en una sartén o en el horno antes de servir para disfrutarlos calientitos.
Por qué te encantará esta receta:
Fresco y sabroso con una combinación de cebollas verdes y espinacas.
Fácil de hacer con ingredientes sencillos.
Versátil como guarnición, aperitivo o plato principal.
Conclusión: Este pan plano casero con cebollas verdes y espinacas es un delicioso y sabroso complemento para cualquier comida.
Con su combinación única de sabores y texturas, seguro que se convertirá en uno de tus favoritos en la cocina.
¡Disfruta del proceso de elaboración y saboreo de este delicioso pan plano!
