1.- En un bol, coloca el agua, la levadura, el azúcar y el aceite. Remueve hasta disolver. Añade la harina y la sal. Amasa durante unos diez minutos o alterna reposos de 10 minutos y amasados de un minuto. Cuando la masa tenga textura lisa, ponla en un bol untado de aceite y tápalo con un film. Deja reposar hasta que doble el volumen (1 hora o más).
2.- Extiende la masa en forma de círculo y divídela en ocho partes iguales. Forma una bola con cada una de ellas y deja que repose tapada durante media hora.
3.- Con la mesa enharinada, extiende cada una de las bolas con el rodillo y forma círculos de unos 12 a 15 cm. Deja reposar unos 15 minutos.
4.- Calienta el horno con la bandeja dentro a 240º C (464º F) con calor arriba y abajo. Coloca 4 panes en cada hornada y cuando se hinchen y empiecen a dorarse, retíralos del horno. Esto les cuesta de 5 a 10 minutos. Para que no se sequen y poder rellenarlos bien, guárdalos envueltos en un paño dentro de una bolsa. Si no quieres encender el horno, hazlos a fuego bajo en una sartén o plancha de asar.
Mi consejo para conservar el pan de pita.
Este pan de pita te puede durar varios días si lo guardas en una bolsita bien cerrada, pero como no lleva conservantes, lo mejor es que si no lo vas a consumir en dos días, lo guardes congelado.
Si te gusta hacer pan casero, te recomiento que pruebes las baguetes que ves en esta foto
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