+ MODO DE PREPARACIÓN.
– Coloca la harina en un bol grande y tamízala para evitar grumos. Añade la pizca de sal.
– Corta la mantequilla fría en cubos pequeños y añádela a la harina.
– Mezcla la mantequilla con la harina usando las puntas de los dedos o un tenedor. Frota hasta que la mezcla tenga una textura arenosa y desmenuzable.
– Si estás haciendo tartaletas dulces, añade el azúcar en este momento y mézclalo bien.
– Haz un hueco en el centro de la mezcla de harina y mantequilla, y añade el huevo. Mezcla con cuidado hasta que empiece a formarse la masa.
– Si la masa está demasiado seca, añade una cucharada de agua fría a la vez y mezcla hasta que la masa se mantenga unida, pero sin estar pegajosa.
– Una vez que la masa esté cohesionada, forma una bola con las manos.
– Envuelve la masa en film plástico y refrigérala durante al menos 30 minutos para que se endurezca y sea más fácil de manejar.
– Saca la masa del refrigerador, estírala con un rodillo sobre una superficie enharinada y colócala en los moldes para tartaletas.
– Después, rellena y hornea según lo requiera tu receta.