Helado de fresa casero sin azúcar

Preparar la base del helado:

Pela el plátano y córtalo en rodajas.
Coloca las rodajas de plátano en una bandeja o recipiente y congélalas junto con las fresas.

Mezclar los ingredientes:
Una vez que las fresas y el plátano estén congelados, colócalos en una licuadora o procesador de alimentos.
Añade la leche de coco, el extracto de vainilla (si lo estás usando), y el jugo de limón.
Licúa todos los ingredientes hasta obtener una mezcla suave y cremosa. Es posible que necesites detenerte y raspar los lados de la licuadora varias veces para asegurarte de que todo se mezcle bien.

Congelar el helado:
Transfiere la mezcla a un recipiente apto para el congelador.
Congela la mezcla durante unas 2-3 horas, removiendo cada 30 minutos durante la primera hora para evitar que se formen cristales de hielo y obtener una textura más cremosa.

Servir:
Saca el helado del congelador unos minutos antes de servir para que se ablande un poco.
Sirve el helado de fresa en boles o conos, y disfruta de este delicioso y saludable postre.

Consejos:

Puedes añadir otras frutas congeladas junto con las fresas para variar el sabor del helado.
Si prefieres un helado más dulce, puedes añadir un poco de edulcorante natural como stevia o eritritol, aunque el plátano debería proporcionar suficiente dulzura.
Para una textura aún más cremosa, puedes añadir una cucharada de mantequilla de almendra o de anacardo a la mezcla antes de licuar.
¡Disfruta de tu helado de fresa casero sin azúcar!

Leave a Comment