Corta 15 centímetros de una ramita de romero en diagonal y retira las hojas de su base.
Llena un vaso con agua e introduce la ramita en él. Déjelo en remojo durante la noche.
Coloca el vaso con la planta cerca de una ventana, en una zona de la casa que no sea muy fría.
Si notas que el agua se evapora durante el proceso, añade un poco de agua a temperatura ambiente.
Una semana después ya se habrán formado las primeras raíces.
Cuando las raíces estén bien formadas (unas tres semanas después), el romero estará listo para colocarlo en una maceta con tierra.
Pon un poco de abono con la tierra, haz un agujero en el centro e introduce la ramita.
Durante la primera semana regar cada dos o tres días. Recuerda que el romero sufre por exceso de riego.
Ahora que ya sabes cómo reproducir el romero a partir de una ramita, empieza inmediatamente a tener una planta próspera en el menor tiempo posible.
Cómo cultivar romero rápidamente a partir de una ramita
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