Chow Mein de Pollo: Un Festín Asiático en Cada Bocado

Instrucciones:

  1. Preparar los fideos: Comienza cocinando los fideos según las instrucciones del paquete. Normalmente, basta con hervirlos en agua con sal durante 3-4 minutos. Una vez listos, escúrrelos bien y enjuágalos con agua fría para detener la cocción. Esto también ayuda a evitar que se peguen. Déjalos escurrir completamente mientras preparas el resto de los ingredientes.
  2. Saltear el pollo: Calienta 1 cucharada de aceite vegetal en una sartén grande o wok a fuego medio-alto. Añade los trozos de pollo, previamente sazonados con sal y pimienta, y cocínalos hasta que estén dorados y bien cocidos, aproximadamente 5-6 minutos. Es importante que el pollo se dore bien para que conserve todos sus jugos. Retira el pollo de la sartén y resérvalo.
  3. Cocinar las verduras: En la misma sartén, añade la otra cucharada de aceite vegetal. Agrega el ajo picado y deja que se dore ligeramente para liberar su aroma. Luego, incorpora el repollo rallado, las zanahorias en juliana y el pimiento morrón en tiras. Saltea todo durante 3-4 minutos, asegurándote de que las verduras queden tiernas pero aún crujientes. Este paso es esencial para mantener la frescura y los colores vivos del plato.
  4. Unir los ingredientes: Ahora es momento de devolver el pollo a la sartén, junto con los fideos cocidos. Vierte la salsa de soja, la salsa de ostras (si la estás utilizando) y el aceite de sésamo. Mezcla todo muy bien para que los fideos y el pollo se impregnen de los sabores de la salsa y las verduras. Cocina durante 2-3 minutos más, asegurándote de que todo esté bien caliente.
  5. Toque final y presentación: Para dar el toque final, espolvorea los cebollines picados por encima justo antes de servir. Puedes añadir un poco más de salsa de soja o incluso unas gotas de salsa picante si te gusta con un poco de chispa.

Consejos para un Chow Mein Perfecto:

  • Varía las verduras: Puedes añadir otras verduras como brócoli, champiñones o brotes de soja para dar diferentes texturas.
  • Usa fideos frescos si es posible: Los fideos frescos suelen ser más sabrosos y se integran mejor con los ingredientes.
  • Cocina a fuego alto: Para un resultado más auténtico, cocina todos los ingredientes a fuego alto y de forma rápida, para obtener un salteado perfecto.

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