Sazonar:
Coloca la carne en un recipiente grande y sazónala con sal, pimienta, y si lo prefieres, un poco de ajo en polvo. Agrega el jugo de un limón y mezcla bien. Deja reposar por unos 10-15 minutos para que la carne absorba los sabores.
Freír:
En una sartén profunda o una olla, calienta una buena cantidad de aceite a fuego medio-alto. Una vez caliente, agrega los trozos de panceta de cerdo con cuidado.
Cocinar:
Fríe la carne hasta que esté bien dorada y crujiente. Esto puede tomar entre 15-20 minutos, dependiendo del tamaño de los trozos y el grosor de la piel.
Escurrir:
Retira los chicharrones del aceite y colócalos sobre papel absorbente para eliminar el exceso de grasa.
Servir:
Sirve el chicharrón en un plato con cuartos de limón al lado. Exprime un poco de limón sobre los chicharrones justo antes de comer para un sabor refrescante y delicioso.
¡Disfruta de este chicharrón crujiente y sabroso, perfecto para compartir en reuniones o como un antojito especial!