Pollo a la parrilla con pesto y tomates asados
- Este delicioso plato es una mezcla de sabores mediterráneos: el pollo es tierno y jugoso, realzado con un toque de pesto fresco y acompañado de tomates cherry asados que aportan una dulzura ligeramente ácida. Es una comida fácil de preparar pero llena de sabor, perfecta para una cena en familia o con amigos.
Ingredientes:
Para 4 personas
- 4 pechugas de pollo
- 200g de tomates cherry
- 4 cucharadas de pesto (casero o comprado)
- 3 dientes de ajo (finamente picados)
- 3 cucharadas de aceite de oliva
- 1 cucharadita de sal
- 1/2 cucharadita de pimienta negra molida
- 1 cucharadita de hierbas provenzales (o tomillo/romero)
- 1 cucharada de vinagre balsámico (opcional)
- Un poco de jugo de limón (opcional)
Para el pesto casero (opcional):
- 1 manojo de albahaca fresca
- 50g de piñones
- 2 dientes de ajo
- 50g de queso parmesano rallado
- 100ml de aceite de oliva
- Sal y pimienta al gusto
Para conocer los PASOS de cocción completos, diríjase a la página siguiente o abra el botón (>) y no olvide COMPARTIR con sus amigos de Facebook.
Paso 1: Preparación del pesto (si lo haces casero)
- En una licuadora o procesador de alimentos, mezcla la albahaca, los piñones, los dientes de ajo y el queso parmesano. Tritura hasta obtener una pasta.
- Añade lentamente el aceite de oliva mientras sigues triturando hasta obtener una consistencia suave.
- Sazona con sal y pimienta al gusto. Reserva el pesto en el refrigerador.
Paso 2: Marinar el pollo
- En un bol, mezcla el aceite de oliva, el ajo picado, las hierbas provenzales, la sal y la pimienta.
- Haz unas incisiones ligeras en la parte superior de las pechugas de pollo para que la marinada penetre mejor.
- Unta generosamente el pollo con esta mezcla. Cubre y deja marinar en el refrigerador durante al menos 30 minutos, preferiblemente 1 a 2 horas para maximizar el sabor.
Paso 3: Preparación de los tomates asados
- Precalienta el horno a 180°C.
- Coloca los tomates cherry en una bandeja de horno o en una fuente apta para el horno. Rocíalos con un poco de aceite de oliva, espolvorea hierbas provenzales, y añade sal y pimienta al gusto.
- Hornea los tomates durante 15 a 20 minutos, hasta que empiecen a reventar y estén tiernos. Puedes añadir un chorrito de vinagre balsámico para un toque dulce y ácido.
Paso 4: Cocinar el pollo
- Mientras los tomates se asan, calienta una sartén a fuego medio con un chorrito de aceite de oliva.
- Cocina las pechugas de pollo de 6 a 7 minutos por cada lado, hasta que estén doradas y cocidas por dentro. También puedes asarlas en la parrilla para un sabor más ahumado.
- Una vez cocidas, retira las pechugas de la sartén y déjalas reposar unos minutos.
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Paso 5: Montaje del plato
- Corta las pechugas de pollo en rodajas, como en la foto, sin separarlas completamente.
- Coloca las pechugas de pollo en un plato para servir.
- Añade una cucharada de pesto sobre cada pechuga de pollo. El pesto se derretirá ligeramente con el calor del pollo, creando una salsa sabrosa.
- Coloca los tomates cherry asados alrededor del pollo para completar el plato.
Paso 6: Toques finales
- Para un toque de frescura extra, puedes rociar un poco de jugo de limón antes de servir.
- Este plato se acompaña perfectamente con arroz, pasta o una simple ensalada verde.
Consejos y Variantes
- Pesto personalizado: Puedes personalizar el pesto reemplazando los piñones por nueces o almendras para una opción más económica.
- Variedad de tomates: Usa diferentes tipos de tomates (cherry, roma, amarillos) para añadir color y sabores variados.
- Cocción al horno: Si lo prefieres, puedes cocinar el pollo en el horno para una cocción más suave. Coloca las pechugas marinadas en una fuente, añade un poco de agua o caldo para evitar que se sequen, y hornea a 180°C durante 25-30 minutos.
¿Por qué este plato es una apuesta segura?
Este plato combina simplicidad con sofisticación. La mezcla de pollo a la parrilla, pesto lleno de sabor y tomates cherry asados crea un equilibrio perfecto de texturas y sabores. Además, es una opción saludable, rica en proteínas, ideal para los amantes de la cocina mediterránea.
El pesto casero añade una dimensión única, mientras que los tomates aportan una explosión de dulzura natural. Este es el tipo de receta que puede convertirse fácilmente en un clásico en tu repertorio culinario, ya que se puede servir en ocasiones especiales o como una comida rápida entre semana. Además, es una receta flexible que se puede adaptar a diferentes dietas modificando los ingredientes del pesto o añadiendo acompañamientos ligeros.
Conclusión
Con esta receta de pollo con pesto y tomates asados, tendrás un plato lleno de sabor, fácil de preparar y que impresionará a tus invitados sin duda. Ya sea que elijas hacer el pesto tú mismo o utilizar uno comprado, el plato sigue siendo sencillo pero delicioso. Sírvelo con una copa de vino blanco seco o una limonada casera para una comida perfecta